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¿Es necesaria la monarquía parlamentaria?

¿Es Necesaria la monarquía parlamentaria?

Nueva percepción de la antigua forma de gobierno...
Fuente: Foro para la Concordia Civil

El sistema monárquico absolutista fue uno de los métodos de gobierno más utilizados durante la edad media. Sin embargo, no fue hasta el siglo XVI que la revolución francesa, mostró al mundo la necesidad de efectuar cambios a ese sistema, lo cual dio paso a una nueva percepción de la antigua forma de gobierno, convirtiéndose en monarquía parlamentaria, y los inicios de la democracia moderna.

Por ello, inicia un largo proceso en el cual, el rey va perdiendo poderes y favores de decisión política. No obstante, la monarquía no ha desaparecido por completo, esto sigue siendo incluso en el siglo XXI motivo de controversia.

En el continente europeo gran parte de los países aún mantiene una monarquía parlamentaria, que es apoyada por sectores conservadores que consideran necesaria la participación activa de una familia real.

De acuerdo a las ventajas y desventajas que la monarquía parlamentaria como sistema de gobierno puede proporcionar a un determinado país, nos planteamos la siguiente interrogantes: ¿Es necesaria la monarquía parlamentaria?

Con respecto a las ventajas de la monarquía parlamentaria, después del análisis realizado hemos identificado tres. En primer lugar, la imagen representativa y simbólica del rey provee una estabilidad al país y por lo tanto, establece relaciones de interés por su historia con otras naciones. Debido a que, las monarquías no son únicamente un símbolo de representación cultural, sino que también simbolizan la unidad nacional y tradiciones históricas de sus respectivos países. Por ello, la familia real es representación de los ideales de una nación ante el resto del mundo, aspecto indispensable para la correcta identificación del pueblo de una nación y de esa forma, generar una sensación de fortaleza, confianza y voluntad de hacer conocida su cultura en el mundo. A partir de ello, se estimula y refuerza a nivel internacional el deseo de miles de personas de aproximarse a una realidad y organización política distinta.

En segundo lugar, según el Índice Democrático elaborado por la unidad de investigación de “The Economist” en el cual se evalúan criterios como el proceso electoral, el pluralismo político, el funcionamiento del gobierno, la cultura política y las libertades civiles, se señala que de las veinte primeras democracias plenas diez de ellas son monarquías parlamentarias. Información que plantea la siguiente interrogante, ¿por qué este sistema de gobierno es efectivo democráticamente?
La creación de una institución parlamentaria generó el inicio de una nueva concepción de las labores del rey y la familia real. Por lo tanto, el monarca perdía toda potestad legislativa, se convertía en un moderador dentro del sistema político de un país, pero al mismo tiempo alejado del ejercicio del poder. La figura del rey en un sistema liberal democrático es ajeno a las contiendas políticas, favoreciendo de esa forma a la democracia.

En tercer lugar, el monarca y la familia real por su popularidad influyen de manera importante en iniciativas sociales con la finalidad de buscar un cambio positivo en las poblaciones vulnerables, muchas veces en el rol de filántropos. Por ello, es importante reconocer la popularidad de la familia real. En el caso de la monarquía del Reino Unido, esta posee un 76% de popularidad. Porcentaje que según en el artículo “¿Cuál es el motivo de la vigencia de las monarquías en el siglo XXI?” la autora, Kate Maltby, muestra que los miembros de la familia, William y Kate, a pesar de no tener poder político alguno, cuentan con un importante poder simbólico: el de “influir y llamar la atención del mundo”. Ellos utilizan esta influencia para promover el desarrollo de distintos proyectos sociales, como el apoyo a la campaña "Clap for Carers", rindiendo homenaje a médicos, enfermeros y demás profesionales que trabajan arduamente por la crisis sanitaria. Además, de colaborar y exhortar a la población la colaboración con donaciones a la fundación National Emergencies Trust, que apoya a las personas y organizaciones benéficas locales que sufren por los efectos del virus.

En contraposición, respecto a las desventajas de la monarquía parlamentaria podemos mencionar que la designación de importantes cantidades de dinero a los monarcas para su uso cotidiano es uno de los actos más cuestionados por la población, pues este dinero es sacado de los impuestos que pagan los ciudadanos y repartido por los gobiernos para el uso de la familia real.

La monarquía Británica recibe un monto anual para su manutención de 104, 7 millones de dólares, incrementándose en un 8% más que el ejercicio anterior según la BBC, de los cuales solo la Reina Isabel II recibiría el 15% de estos ingresos (15.7 millones de dólares). Alan Reid, tesorero de la realeza indicó que es un “buen precio”. "Cuando miras estas cuentas, la conclusión es que los gastos de manutención de la monarquía equivalieron en 2016 a 65 céntimos anuales por persona en el Reino Unido", aseguró.

Sin embargo, la plataforma Republic, que aboga por que el Reino Unido deje de ser una monarquía, afirma que el presupuesto anual asciende a un monto de 439 millones de dólares. No son solo las grandes sumas de dinero que recibe la monarquía lo que genera una diferencia entre ellos y la población en general, sino también la inviolabilidad una especie de inmunidad, que es establecida en ciertas constituciones para proteger de ciertos impases a la monarquía y familia real, un beneficio que no tienen los ciudadanos “comunes”.

En España existe el inciso 3 del artículo 56 de la Constitución que dice: “La persona del Rey es inviolable y no está sujeta a la responsabilidad” lo cual sugiere que el rey tiene un blindaje legal en el ámbito penal, aunque también se llega a afirmar que este “blindaje” se extiende hasta la rama civil. Algunos catedráticos, como es el caso de Antonio Torres del Moral, catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) afirma que el rey no debe responder jurídicamente por ningún caso fuera de la naturaleza que fuere.

El ex rey de España, Juan Carlos I, que abdicó en el año 2014 con la premisa que su hijo, Fernando IV, estaba listo para asumir el puesto, actualmente se ha visto sumido en un sinfín de escándalos relacionados a un supuesto cobro de comisiones para la construcción del AVE en La Meca y Medina.

En primera instancia, la Audiencia Nacional archivó el caso en el 2018 pues se trataba de un acontecimiento ocurrido antes de la abdicación lo que lo hacía en ese entonces inviolable. A pesar que se tuvo esta apelación, la Fiscalía del Tribunal Supremo abrió diligencias por las cuales se reabrió la investigación. En un mensaje de navidad del 2015 Juan Carlos afirmó que “la Justicia es igual para todos” lo cual es irónico pues al momento de enterarse que la fiscalía había reabierto el caso se marchó a los Emiratos Árabes Unidos pues es el paraíso para los trabajadores expatriados según la BBC (2019).

Finalmente, después del análisis realizado podemos concluir lo siguiente: la monarquía parlamentaria, mientras no se desvíe de sus funciones atribuidas por el sistema parlamentario y se mantenga comprometida a seguir sus labores de representatividad con honestidad y responsabilidad, seguirá atribuyendo oportunidades y perdurará a lo largo del tiempo en sus respectivos países. Sin embargo, es importante que, como receptores de esta información, cuestionemos la efectividad y necesidad de este sistema político en los tiempos actuales.

Míralo resumido en nuestra infografía:

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