CONSILIUM
Club de Relaciones Internacionales
CONSILIUM
Club de Relaciones Internacionales
CONSILIUM

“Es nuestro 11 de septiembre”: ¿Israel a puertas del dominio total?

“Es nuestro 11 de septiembre”: ¿Israel a puertas del dominio total?

Fuente: Foto de MAHMUD HAMS/AFP vía Getty Images

Contexto

Palestina fue uno de los territorios otomanos que quedó bajo la administración británica después de la Primera Guerra Mundial, y que a pesar de la independencia de otros territorios en la misma situación, permaneció bajo el Mandato Británico. En 1917, se dió la declaración de Balfour, la cual sería el punto de partida para el eterno enfrentamiento que hoy tiene conmocionado al mundo entero por el reavivamiento del fuego. En dicha declaración el Gobierno de Reino Unido apoyó el objetivo sionista de establecer el hogar nacional de los judíos en Palestina. 

De 1922 a 1947 se dió la primera ola de inmigración judía de gran escala al Mandato británico de Palestina, dándose la mayor cantidad de migración en 1930 como producto de la persecución nazi. Como consecuencia se fueron formando asentamientos judíos en gran parte del territorio, donde los enfrentamientos arabe-judío hicieron insostenible la situación.

Posteriormente, mediante la Naciones Unidas y la Resolución 181 que se estableció la solución de los dos Estados, dando lugar al Estado de Israel y al Estado de Palestina. Esta situación incrementó la ya existente tensión arabe-israeli y dió lugar a 3 armisticios con los países vecinos, donde Israel se hizo con territorios a partir de los cuales incrementó su dominio y obtuvo el reconocimiento de Egipto (primer Estado arabe en reconocer a Israel). Es así como, se configuró el mapa de dominio territorial actual, donde Israel domina efectivamente la mayor parte del ex-mandato británico de Palestina y Palestina tan solo tiene posesión sobre la Franja de Gaza y presencia en Cisjordania mediante asentamientos, hablamos tan solo de presencia pues el dominio no es efectivo, ya que es un territorio discontinuo y en el que las autoridades israelíes tienen el control.

Ciertamente, solamente durante los años alrededor de los acuerdos de Oslo de BCCD la solución de dos Estados era una alternativa, debido a la presencia de electorados para el compromiso tanto de Israel como de Palestina y se había concretado un progreso tangible pero fugaz hacia la construcción de las instituciones de un hipotético Estado palestino. Sin embargo, hoy en día, Israel bajo el gobierno de Benjamin Netanyahu junto a una coalición de derecha radical y ultraortodoxa, excluye la solución de dos Estados. En su lugar, este gobierno propone un Estado donde la ley promueve la supremacía judía. Ciertamente esta es una realidad que ya existía pero con el gobierno actual es imposible negar. El Estado de ocupación de los territorios palestinos es ahora permanente. Todo el territorio al oeste del río Jordán ha constituido durante mucho tiempo un único estado bajo el dominio israelí, donde la tierra y la gente están sujetas a regímenes jurídicos radicalmente diferentes, y los palestinos son tratados permanentemente como una casta inferior. Un acuerdo de un solo estado no es una posibilidad futura; ya existe, solo que aun no es reconocido ni por Israel, ni internacionalmente.

Por último, es importante resaltar que, los asentamientos palestinos de Cisjordania están bajo el gobierno de la Autoridad Nacional de Palestina (ANP), pese a que en la práctica no posean el poder efectivo sobre estos territorios, y la Franja de Gaza se encuentra bajo el control del grupo militante islamista Hamás desde 2006. El gobierno Palestino esta conformado por distintas organizaciones políticas, de las cuales Hamas (considerado como un grupo terrorista) posee la mayoría. Además, el Gobierno de Al Fatah se ha debilitado progresivamente por su falta de accionar frente al declive de la calidad de vida de la población palestina y la pérdida constante de territorio frente a Israel, así como, por la corrupción cometida por este.

Antecedentes: La Guerra contra el terror de Estados Unidos

Tras el atentado del 11 de septiembre de Al Qaeda, el gobierno de Estados Unidos inicia la conocida como “La guerra contra el terror”, la cual daría lugar a su intervención en Afganistán enfrentando al gobierno de facto del Talibán y la invasión ilegal a Irak bajo el pretexto de la existencia de armamento nuclear. En este artículo no se busca hacer un recuento de todos los hechos que implican la Guerra contra el Terror de Estados Unidos, en su lugar, se pretende traer a colación las principales características que tuvo el accionar estadounidense bajo este lema. 

El enfrentamiento de los Estados contra el terrorismo significo un reto, siendo este un fenomeno nuevo, y por ende, se carecía de un marco internacional sobre las posibilidades y limites para luchar contra este. El terrorismo significo, y significa aún hoy en día, un tipo de guerra distinto al clásico, pues en este caso los combatientes no estan identificados, en su lugar, el terrorismo se caracteriza por la actuación secreta y anónima, asi como, el ataque no solo a fuerzas opositoras sino a civiles con despliegue de atentados contra estos para difundir terror.

En ese sentido, la actuación de Estados Unidos fue compleja y en la búsqueda de identificar y vencer al enemigo cometió múltiples violaciones a los derechos humanos. Un ejemplo claro fueron las detenciones arbitrarias de personas consideradas sospechosas en la prisión de guantánamo bajo la calificación de detenidos y no de prisioneros para evitar violar la normativa internacional sobre prisioneros de guerra. Es así que, por la complejidad de identificación del enemigo, la lucha contra el terrorismo se suele caracterizar por la discriminación y la violación de los derechos humanos de civiles. Ciertamente, de acuerdo con Arun Kundnani, profesor y escritor experto en la guerra contra el terror y el extremismo:

“La guerra mundial contra el terrorismo y la arquitectura antiterrorista a la que ha dado lugar no nos han hecho sentir más seguros después de 20 años de guerra. Como era de esperarse, responder a la agresión con agresión ha instigado la violencia en lugar de combatirla y ha reforzado las estructuras de poder racistas e imperialistas.”
Arun Kundnani
Profesor y escritor experto en islamofobia

Punto de Inflexión

Para Estados Unidos el punto de inflexión fue el ataque terrorista a la torres gemelas y el Pentágono, y para Israel, el último ataque de Hamas contra su población y autoridades es considerado como su punto de inflexión, en palabras del portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI): “este es nuestro 11 de septiembre”. Asimismo, el teniente coronel Jonathan Conricus también asimiló los ataques de Hamás con los ataques en EE.UU.

Los ataques de Hamas contra Israel perpetrados en la madrugada del 7 de octubre (7-O) del presente año son el mayor ataque del grupo terrorista desde la toma de la Franja de Gaza en 2007, y de acuerdo a medios locales israelíes ha resultado en la muerte de 150 personas y más de 1000 heridos. 

Ante estas declaraciones surgen las siguientes preguntas: ¿Israel cometerá los mismos errores que Estados Unidos?, ¿Cuál será el destino de la Franja de Gaza?, ¿Es tan solo una escalada de tensiones más o modificará el dominio territorial de la Franja de Gaza?, ¿Cambiará el accionar pasivo de la comunidad internacional frente a este conflicto?.

Respuesta de Israel

Frente a toda esta situación, resulta evidente que la respuesta de Israel no sería pasiva ni mucho menos leve. De hecho, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, declaró el sábado 7 de octubre que se encontraban en guerra, dando lugar a una serie de ataques aéreos contra Gaza los cuales resultaron en una gran cantidad de fallecidos. Por otro lado, el lunes 9, los militares israelíes lograron tomar el control de todas las comunidades cerca de la frontera con Gaza. Esto fue afirmado por el portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), Daniel Hagari, quien también menciona que aún se están desarrollando enfrentamientos con militantes palestinos armados.

Asimismo, entre una de las acciones que se están llevando a cabo es la mencionada por BBC News, donde “una gran cantidad de tropas, tanques y otros vehículos blindados se agrupan en el sur de Israel, dando señales de una inminente invasión de Gaza”. Dicha señal se ve respaldada por The New York Times, el cual informa que “Israel ha movilizado a 360.000 reservistas y las tropas se están concentrando en la frontera, lo que lleva a especular con la posibilidad de que Israel lance pronto una ofensiva terrestre”.

Al mismo tiempo, Israel cortó los suministros de electricidad, combustible y agua a Gaza. Según BBC News, para el 11 de octubre Gaza ya no contaba con electricidad, y las reservas de comida y agua se estaban agotando. Ello quiere decir, que Israel los estaba privando de sus necesidades básicas, tomando en cuenta que controla el espacio aéreo y las costas de Gaza, restringiendo así el ingreso de bienes.

Respuesta de la Comunidad Internacional

Resulta evidente que esta guerra también tendría un impacto en la comunidad internacional, y generaría una respuesta frente a la terrible situación que ocurre en el territorio. De hecho, una de las respuestas más significativas es en relación a los civiles. La violencia y los crímenes que se están cometiendo contra la población es terrible, y es un gran motivo de preocupación e insatisfacción a nivel internacional. Se están condenando las acciones no solo tomadas por Hamas, sino también por parte de Israel. En realidad, este último, en algunos casos, es el que se encuentra sufriendo el mayor peso de esta insatisfacción. El motivo de ello es claramente explicado por Alonso Cárdenas: “Hamás es una organización terrorista, pero Israel es un Estado, no se pueden poner al mismo nivel. Lo que se está viendo realmente es una carnicería que no se puede justificar bajo ningún parámetro de derechos humanos”.

Además, es importante resaltar cuál es la posición tomada por Estados Unidos, principal aliado de Israel. Antes del ataque de Hamas contra Israel, Estados Unidos se mantenía en una posición donde ante la opinión pública apoyaba la solución de dos Estados para mantener contentos a los votantes estadounidenses que valoran los principios democráticos, libertades y derechos humanos; mientras que, en la práctica se observa que el apoyo a la solución de dos estados ha disminuido, y en su lugar, se observa a Estados Unidos vetando resoluciones del Consejo de Seguridad que pretenden mantener Israel responsable, y también, obstaculizando los esfuerzos palestinos para buscar reparación en los tribunales internacionales. Frente a los recientes acontecimientos, esta posición se mantiene, pues tras la gira de Blinken, Secretario de Estado de los Estados Unidos de América, por Medio Oriente, el único accionar que se preveía es el ingreso de ayuda humanitaria por la frontera con Egipto. Sin embargo, este 18 de octubre, Estados Unidos vetó en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas la Resolución de Brasil para el alto al fuego y la implementación de un corredor humanitario. Además, Estados Unidos y el bloque occidental no ejercen una real presión para el alto al fuego, ni la detención y juicio por los crímenes de guerra cometidos por Israel, que declara continuará su accionar hasta acabar con Hamas.

Implicaciones y Prospectiva

En conclusión, la situación entre Israel y Hamas es sin duda muy complicada debido a una serie de factores históricos, y a la poca capacidad que se tiene para generar una solución a la problemática. Es a causa de esto que la guerra posiblemente no llegue a terminar o detenerse en un futuro cercano, principalmente por el lado de Hamas y la violencia que ha demostrado no tener miedo de usar desde el surgimiento de este conflicto. Lamentablemente, los más perjudicados, como siempre, son los ciudadanos. Resulta impactante la cantidad de fallecidos que se han generado durante este corto periodo de tiempo (desde el 7 de octubre a la fecha), y la poca humanidad que ambas partes muestran hacia estos individuos. 

Benjamín Netanyahu anunció que el contraataque lanzado contra la franja de Gaza sólo era el comienzo de una costosa guerra para Hamás. A pesar de los crímenes de guerra y complejidades que la contraofensiva israeli implica, la comunidad internacional ha expresado su apoyo y a diferencia de lo que sucede con la Invasión de Rusia a Ucrania, en este caso, el ocupante no es visto como el enemigo.

Entonces, al parecer, muy por el contrario a lo que mencionan algunos expertos, los recientes acontecimientos no cambiarán la posición de la comunidad internacional hacia la promoción activa de la solución de dos estados, y por ende, el fin de la ocupación sobre los territorios palestinos. En su lugar, lo que han demostrado es que se mantendrán en una posición que ignora la situación y solo emite declaraciones que no evocan a ningún cambio; y permiten que Israel siga avanzando territorialmente mientras la población sufre las consecuencias.